viernes, 14 de diciembre de 2018

MUDANZA


De todas las mudas de piel
que se fueron hasta hoy

caballos inamansables!
SANGRE terciopelo

El tiempo pasa y nos ponemos mas PUNK!
 
momento del mundo en que conocimiento 
no equivale a razón y 
razón no equivale a universal 
y universal no equivale a abstracción...
 
 
 
 
 
( l a s g a n a s i n t a c t a s )
 
 
 
uno:
 
dos:
 
 

sábado, 1 de diciembre de 2018

Tejedoras en la Ventana



             

             Sanaa Moussa- La Tetlaa'i

Hiena.

Seguir el impulso, seguir el rio..... Entonces giro la perilla, estoy afuera.

Ensillo la bici, me aseguro que la cámara no se golpee. Pedaleo.

Pum. Aglomeración, Pum, 5 policias, 10, 50. Mil! en todas las direcciones.

Un helicóptero, dos, tres, pasa otro y otro.

Estado de sitio,
antenas erguidas, pelos de punta,  expectantes orejas.

Atenas destruidas.

Pedaleo.

Respiro el miedo, percibo los sudores de las manos sobre los redoblantes, los pasacalles.

Registro, capturo.
Pedaleo.
Voy y vuelvo.
Miro con ironia a Eva en medio de la nueve de julio, el humo, el sol fluorescente.

Pongo un limite a mi recorrido, vuelvo a casa,
con una coraza enorme de preguntas,
con un bulto de molotov por cada célula adentro,
con dinamita para detonar una argentina entera.

Estoy confundida.

Llego a la esquina antes de mi puerta.
Están los mismos rostros de siempre empuñando la cerveza, perros de pija parada.

Cruzo.

Me llaman,  me babosean.

Continuo.
Creo ser consciente de la masa rabiosa y vulnerable
que me compone en este momento.

Avanzo.

Silencio.


PUM PUM PUM PUM!

PUUUUUUUUMMMM!

Mi dinamita no lo soportó,
Accionó con fuerza sobre la chapa verde del puesto de diarios.
El manubrio de mi bici martilló fuerte y con énfasis,
R E V E N T É.

Me creció el pecho
hirvió caliente,
espeso
volcánico.

Inhale profundo,
Inicié una silenciosa requisa,
mirando a los ojos,
a c e r c á n d o me
como si los oliera,
acechándolos,

c e r c a n d o l o s  con mi incomoda presencia repentina.

Como una loba rodeando antes de matar  para dar de comer a su cría.

Uno a uno detallé
desde su craneo hasta sus fétidas falanges del pie.

Silencio atmosferico. Cambio de paisaje.

La esquina dejo de ser su calle.

Enmudecieron.

Plano secundario: Un auto se detiene en el semáforo, se cuelga en la escena.

Primer plano: Una pareja con un coche pasa, la mujer me mira, baja la mirada, cruzan.

Escenario: El viejo mayor del centro suelta una carcajada, "es muy buena" dice.

Mi dinamita se detiene. Avanza el felino.

Saco los colmillos, me rio con él, la dinamita eclosiona, apruebo con sus mismos gestos,

soy su espejo, histericamente repito sus ademanes.

El resto, 5, 6 mas, no entienden que pasa. El kioskero sale a ver.

Imito con detenimiento y morbo una mano que se agarra las gónadas y se las acomoda,
empujo mi mentón hacia adelante, me invade la testosterona,
mi espalda arqueada me convierte en uno mas.

Rio con desquicia.

Confusión.

Fin del 1er Acto.


"Es artista, no?" "jajaja" .

Mi masa rabiosa es ahora un viejo pajero de esquina
rie desbocadamente
ojos panteras pirotécnicas.


YA NO TENGO MIEDO.


Pum. GOLPE a la chapa.

Me giro con lentitud filosa.

Mis ojos aun permanecen en el campo iluminado del escenario.

QUIETUD.

Algo se quebró entre la pesadilla y la rutina.


Helada viene una estela por donde desvanezco.
Mi lomo entra por el pasillo del edificio.

Mis viseras siguen calientes,
ahora mi cría mastica el veneno con placer.


Escribo hoy con alma aquietada,
repasando la escena que protagonicé.








               


            Maii & Zeid - 

           Hassafer Baeed